El fin de semana estalló un peligroso ciclo de violencia entre Israel y grupos palestinos en Gaza, después de que el grupo Hamás lanzara cohetes contra territorio israelí. Ante esto, Tel Aviv respondió con fuertes ataques aéreos sobre la Franja. Este recrudecimiento del histórico conflicto árabe-israelí provocó que los precios del petróleo repuntaran con fuerza, ante los temores entre inversionistas y analistas a una posible extensión de la violencia en Oriente Medio.
¿Cuánto aumentaron los precios del petróleo?
El crudo Brent, referencia internacional, superó este lunes los 88 dólares por barril, su nivel más alto desde principios de septiembre. Según los analistas, los precios del petróleo probablemente se mantengan elevados mientras no haya certeza de que la situación no derivará en una reacción en cadena de violencia en otras naciones de Oriente Medio, arrastrando a actores regionales clave como Irán.
Un factor desestabilizador sería el potencial cierre del estratégico estrecho de Ormuz por parte de Irán como represalia contra Israel, acción que amenazaría el suministro mundial de crudo proveniente del Golfo Pérsico.
A diferencia del histórico embargo petrolero árabe de 1973, después de la guerra entre una coalición árabe y Israel, los expertos consideran poco probable un boicot coordinado a las exportaciones de crudo por parte de Arabia Saudita y otros miembros de la OPEP esta vez. El gobierno saudita prioriza ahora la alianza con Estados Unidos por sobre la solidaridad con la causa palestina.
Más incertidumbre sobre un mercado ya volátil
Pese a esto, la escalada de violencia siembra incertidumbre en un mercado petrolero ya volátil desde la invasión rusa a Ucrania en febrero de 2022. Esto amenazaría con presionar aún más la inflación global, especialmente en naciones en vías de desarrollo dependientes de las importaciones de crudo del Medio Oriente.
El presidente estadounidense Joe Biden ya hizo llamados pidiendo una desescalada del conflicto, pero por ahora la violencia sigue rampante. Hamas ha lanzado cientos de cohetes contra ciudades israelíes, mientras la aviación israelí sigue bombardeando la Franja de Gaza en la peor ola de combates desde la guerra de 11 días en 2021, donde murieron 260 palestinos y 14 israelíes.
El mundo observa con preocupación la peligrosa escalada bélica y cualquier chispa podría desatar una conflagración mayor en la volátil región de Medio Oriente. Un nuevo foco de inestabilidad geopolítica se enciende ahora, exacerbando las presiones inflacionarias globales por el conflicto Rusia-Ucrania. Los precios del petróleo y del gas natural se perfilan al alza mientras la paz siga siendo esquiva en Gaza, Jerusalén y otras ciudades en disputa.