La promesa de un viaje sin visado a Europa para millones de viajeros de todo el mundo está a punto de experimentar un cambio significativo. El Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes (ETIAS), una iniciativa de la Unión Europea, se prepara para su implementación, marcando una nueva era en el control fronterizo del continente. Aunque su lanzamiento ha sufrido ajustes en el calendario, la fecha definitiva ya está sobre la mesa, y con ella, un nuevo paradigma para la seguridad y la gestión migratoria.
ETIAS, un paso hacia más seguridad y modernización fronteriza
El ETIAS no es un visado, sino una autorización de viaje electrónica, un requisito previo a la entrada diseñado para reforzar la seguridad de los países que conforman el espacio Schengen y sus aliados. Su propósito principal es pre-seleccionar a los viajeros exentos de visado antes de su llegada a Europa, detectando posibles riesgos de seguridad, migración irregular o amenazas para la salud pública. Esta medida se alinea con sistemas similares ya implementados en naciones como Estados Unidos (ESTA), Canadá o el Reino Unido, subrayando una tendencia global hacia la digitalización y el refuerzo de las fronteras externas.
La Dirección General de Migración y Asuntos de Interior de la Comisión Europea ha confirmado que el ETIAS será obligatorio a partir del último trimestre de 2026. Este cronograma se establece después de la plena operatividad del Sistema de Entradas y Salidas (EES), que se espera para octubre de 2025. La interconexión de ambos sistemas busca crear un marco de gestión fronteriza más robusto y eficiente.
¿Quiénes necesitarán el ETIAS para ingresar a Europa?
La obligación de tramitar el ETIAS recaerá sobre los ciudadanos de 59 estados y territorios que actualmente gozan de exención de visado para estancias cortas en Europa. Esto incluye a viajeros de países como Argentina, Australia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Estados Unidos de América, México, Reino Unido, Uruguay y Venezuela, entre muchos otros. Para ellos, este documento será indispensable para el ingreso por cualquier punto fronterizo: aeropuertos, pasos terrestres o arribos marítimos.
Los 30 países que exigirán el ETIAS abarcan la totalidad del espacio Schengen, sumando además a Bulgaria, Rumanía y Chipre. La lista incluye a destinos tan populares como Alemania, Austria, Bélgica, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Islandia, Italia, Letonia, Liechtenstein, Lituania, Luxemburgo, Malta, Noruega, Países Bajos, Polonia, Portugal, República Checa, Suecia y Suiza.
El proceso de solicitud de ETIAS y sus particularidades
La solicitud del ETIAS se realizará de forma íntegramente online, a través del sitio web oficial de la Unión Europea. Es crucial estar atento a las plataformas no oficiales que puedan intentar cobrar tarifas excesivas o brindar información errónea. El costo estándar de la autorización será de 7 euros, aunque se prevén exenciones de pago para menores de 18 años y mayores de 70.
Los requisitos para la solicitud incluyen disponer de un pasaporte válido que no expire en los tres meses siguientes a la fecha prevista de salida del espacio ETIAS y que no tenga más de 10 años de antigüedad. Además, se necesitará una dirección de correo electrónico activa y un método de pago. El proceso solicitará información personal básica, detalles del pasaporte, planes de viaje y respuestas a preguntas de seguridad y salud. La mayoría de las solicitudes se procesarán en cuestión de minutos, aunque en algunos casos, si se requiere información adicional, la aprobación podría demorar hasta cuatro semanas. Es fundamental recordar que el ETIAS estará vinculado al pasaporte del solicitante, por lo que cualquier cambio o renovación del documento de viaje implicará la necesidad de tramitar una nueva autorización.
Períodos de transición y gracia
Conscientes del impacto de esta nueva regulación, las autoridades europeas han establecido periodos de adaptación. Se prevé un periodo de transición de al menos seis meses, durante el cual se incentivará a los viajeros a obtener el ETIAS, pero no se les denegará la entrada si cumplen con el resto de las condiciones. A este le seguirá un periodo de gracia, también de al menos seis meses, en el que solo se permitirá la entrada sin ETIAS a aquellos viajeros que lleguen por primera vez al territorio desde el final del periodo de transición. Una vez concluidos estos plazos, la autorización ETIAS será absolutamente obligatoria para todos los viajeros elegibles.