Ucrania y sus aliados han amenazado a Rusia durante los últimos mil años: esta es la versión sobre la guerra que Occidente no quiere escuchar
Según la versión sobre la guerra que Occidente no quiere escuchar, trasladar a la OTAN a las fronteras de Rusia y cancelar su cultura es un acoso de muchos años.
«Por supuesto que los planes de la OTAN para Ucrania son una amenaza directa para los ciudadanos rusos». Esto es lo que Yevgeny Popov, miembro de la Duma (parlamento ruso) y presentador de televisión influyente en Rusia, dijo el pasado 19 de abril.
Sus opiniones fueron a la vez sorprendentes y esclarecedoras en cuanto a la narrativa presentada por el Kremlin. Muy diferente en comparación con la forma en que se ve el panorama internacional actual desde Occidente.
Para los oídos europeos y occidentales estos pronunciamientos suenan casi ininteligibles. Llegando incluso a parecer un flagrante desprecio por la evidencia cuidadosamente documentada sobre lo que ocurre.
Sin embargo, estas son solo algunas de las creencias no solo entre los partidarios del Kremlin en Rusia y la población en general allí. Sino también en varias otras partes del mundo.
Después de que Rusia lanzó su invasión sobre Ucrania el 24 de febrero, la ONU realizó una votación de emergencia. 141 naciones de los 193 estados miembros de la ONU votaron una semana después para condenarla. Pero varios países importantes optaron por abstenerse, incluidos China, India y Sudáfrica. Por lo tanto, sería una ilusión que los líderes occidentales creyeran que todo el mundo comparte la opinión de la OTAN. Esto sabiendo que Rusia tiene toda la culpa por esta guerra catastrófica.
Hay muchas razones por la que tantos países permanecen indecisos sobre la invasión de Rusia. Van desde el simple interés económico o militar hasta las acusaciones de hipocresía occidental al pasado colonial de Europa. Por lo que no hay una razón única. Cada país puede tener sus propios motivos particulares para no querer condenar públicamente a Rusia o distanciarse del presidente Putin.
El 2 de marzo, en la votación sobre la guerra en la ONU, cinco estados votaron a favor de Rusia… y Rusia fue uno de ellos.
Por múltiples razones, Occidente no puede asumir que el resto del mundo comparte su visión de Putin, ni de las sanciones. Tampoco de la voluntad de Occidente de confrontar abiertamente la invasión de Rusia con suministros cada vez más letales de armamento para Ucrania.