El gobierno de Miguel Díaz-Canel anunció un dramático incremento en los precios de los combustibles en Cuba y la electricidad, que entrarán en vigor en febrero y marzo respectivamente.
Estas medidas forman parte de un controvertido paquete económico que busca eliminar subsidios, recaudar divisas y estimular el ahorro energético, según explicó el ministro de Finanzas y Precios, Vladimir Regueiro Ale.
Cuáles serán los precios de los combustibles en Cuba y cómo pagarlos
A partir del 1ro de febrero, los precios de los combustible en Cuba se cuadruplicarán. De esta forma, la gasolina regular costará 1.10 dólares por litro, equivalente a 132 pesos cubanos. La gasolina especial tendrá un precio de 1.30 dólares el litro, o 156 pesos cubanos; mientras que la súper especial llegará a 1.65 dólares el litro, unos 198 pesos cubanos.
El diésel también verá un fuerte incremento, al pasar de 0.90 dólares a 1.10 dólares por litro, es decir de 108 a 132 pesos cubanos.
Esto provocará alzas en cascada en los transportes públicos y privados, la producción de alimentos y en general en todos los sectores que dependen del combustible.
Los nuevos precios se pagarán exclusivamente con medios electrónicos, no se aceptará efectivo. Entre las opciones están tarjetas bancarias internacionales, nacionales prepago, pines de pago móvil y códigos QR.
Habrá una red de estaciones de servicio destinadas solo a la venta en dólares, mientras que el resto venderán en pesos cubanos. El objetivo declarado es recaudar divisas para la importación de combustible.
Cuánto costará la electricidad y el gas licuado
Otra de las medidas que causará gran impacto es un aumento del 25% en la tarifa eléctrica para consumos superiores a los 500 kWh mensuales. Solo un 2.7% de los usuarios residenciales superan ese nivel de consumo, pero representan el 17% de la electricidad consumida en los hogares.
Además, a partir del 1ro de marzo el precio del gas licuado pasará de 180 a 225 pesos el cilindro de 10 kg. La empresa importadora de este producto dejará de recibir subsidios millonarios, que ahora tendrán que ser cubiertos por los consumidores.
Justificaciones y críticas
El ministro Vladimir Regueiro Ale justificó estas impopulares medidas como necesarias para corregir «distorsiones» en la economía cubana. Aseguró que se evalúa constantemente su impacto y que se brindará apoyo específico a los sectores vulnerables.
Sin embargo, los analistas alertan que estos enormes incrementos de los precios de combustibles en Cuba golpearán duramente la economía familiar. Consideran que el gobierno debería primero incrementar la producción de alimentos, bienes y servicios, antes que estrangular aún más el bolsillo de la población.
Critican que no existen garantías de que realmente mejore la disponibilidad de combustible y electricidad. Por el contrario, advierten sobre la posibilidad de una espiral inflacionaria y mayor descontento social. El salario mínimo en Cuba, con la tasa del gobierno del dólar (1 x 120 cup) no supera los 30 dólares mensuales.
Queda por ver cómo reaccionará la sociedad ante este brutal incremento del costo de la vida.
