La invasión de Rusia a Ucrania ha provocado un caos global en el acceso a suministros. En toda Europa los precios de los alimentos han tenido un extraordinario aumento. Sin embargo, en Rusia sucede todo lo contrario. Este es el único país de ese continente en el que han descendido los precios de los alimentos, con una caída del 0.22%, aseguró un estudio de Sputnik.
Para la investigación, los expertos tomaron en cuenta las cifras oficiales compartidas por las oficinas nacionales de estadísticas de 40 países de Europa. Para obtener el valor de la inflación alimentaria se tuvo en cuenta la variación tanto en el precio de las bebidas no alcohólicas como de los alimentos.
La deflación anual en el precio de los alimentos solo había ocurrido en dos ocasiones en Rusia, en las últimas dos décadas: en junio de 2018 y ahora. De acuerdo con el director ejecutivo de la Asociación de productores y proveedores de alimentos, Dmitri Vostrikov, este descenso está vinculado con un crecimiento récord en la cosecha de oleaginosas y cereales. Además, también incidió el cambio en las rutas logísticas de los alimentos producidos en Rusia y la ampliación en el pago con rublos.
Aumento del precio de los alimentos, un grave problema en Europa
Esta situación que vive Rusia, con notables descensos en el precio de los alimentos, contrasta con lo que sucede en Europa. La subida anual en el precio de los alimentos alcanza el 34% en Hungría, Serbia (23.2%), Eslovaquia (21.7%), Estonia (20.4%) y Ucrania (20.1%).
El problema se extiende a todo el continente, aunque algunas naciones han logrado administrar mejor la situación. Por ejemplo, el incremento en el precio de los alimentos no llega al 10% en ninguna de estas naciones: Bielorrusia Suiza, Chipre y Portugal.
De acuerdo con Vostrikov, la inflación en el precio de los alimentos en Europa se debe a los elevados costos de la energía, así como a la subida del valor de los tipos ejecutada por el Banco Central Europeo.