Panamá se ubica ahora entre los principales países en la gestión de fortunas globales, de acuerdo con el más reciente informe de la firma auditora Deloitte. Aunque aún se encuentra lejos de los líderes globales, este avance sitúa a Panamá como un destino relevante en el ámbito financiero internacional.

Un avance clave para el sistema bancario de Panamá

El estudio de Deloitte posiciona a Suiza, Reino Unido y Estados Unidos como los líderes en el sector, pero también señala a países emergentes como Hong Kong, Singapur y ahora, Panamá.

El país centroamericano gestionó activos valorados en 174 millones de dólares en 2023, una cifra que, aunque modesta en comparación con los gigantes financieros, refleja el crecimiento de su infraestructura bancaria y su atractivo para inversionistas internacionales.

Factores que impulsan el crecimiento financiero panameño

El sistema bancario de Panamá ha evolucionado en las últimas décadas, gracias a su estabilidad económica y su ubicación estratégica. Si bien las cifras son considerablemente menores en comparación con los líderes mundiales, la inclusión de Panamá en este ranking de gestión de fortunas globales es un indicio de su potencial para convertirse en un hub financiero de referencia en la región de América Latina.

Uno de los factores clave que ha permitido este avance es el desarrollo de normativas que mejoran la transparencia y seguridad en las operaciones bancarias. A pesar de haber enfrentado críticas por su rol en la evasión fiscal global, Panamá ha implementado reformas que buscan generar confianza en su sistema bancario.

Desafíos en la gestión de fortunas globales

A pesar de este reconocimiento, Panamá enfrenta desafíos significativos para continuar su crecimiento en el sector de la gestión de fortunas. Según el informe de Deloitte, el país experimentó una disminución del 21,5 % en los activos gestionados con respecto a años anteriores. Esta caída refleja las dificultades económicas globales y la creciente competencia en el mercado financiero internacional.

En comparación, otros destinos emergentes como Hong Kong y Singapur han logrado consolidar su posición, con volúmenes de activos que superan los 1.000 millones de dólares. Singapur, en particular, ha mostrado una ligera caída del 2,7 %, pero sigue siendo uno de los actores más relevantes en la gestión de fortunas en Asia.

La caída de Credit Suisse y su impacto en el sector global

El informe de Deloitte también destaca un cambio importante en la estructura del sistema financiero global, que ha afectado tanto a los líderes como a los países emergentes. La crisis que llevó a la caída de Credit Suisse, el hasta entonces segundo banco más grande de Suiza, tuvo un impacto directo en la salida de activos no solo de Suiza, sino también de otros mercados financieros.

Para Panamá, este contexto presenta tanto retos como oportunidades. Si bien la competencia es feroz, la inestabilidad en otros sistemas financieros abre la puerta para que el país centroamericano capte nuevos clientes que buscan diversificar sus activos en mercados más seguros y estables.

El futuro de la banca panameña

A medida que Panamá sigue desarrollándose como un actor relevante en la gestión de fortunas globales, el desafío principal será mantener la confianza de los inversionistas internacionales y adaptarse a las tendencias universales. La banca local está adquiriendo mayor protagonismo, lo que podría ser una ventaja competitiva para países como Panamá, donde los activos locales pueden ser una alternativa atractiva frente a las grandes instituciones internacionales.

Recomendaciones para fortalecer la posición de Panamá en la gestión de fortunas globales

Para que Panamá consolide su posición en el escenario global, expertos sugieren continuar implementando reformas que aseguren la transparencia y el cumplimiento de normativas internacionales. Además, fomentar alianzas estratégicas con otros países y fortalecer su capacidad para atraer a inversores internacionales será clave en los próximos años.