Hoy día, en las calles de Cuba, Venezuela, Haití y Nicaragua la obsesión nacional es solo una: encontrar un patrocinador en Estados Unidos
Luego de que la Administración Biden cambiara drásticamente las reglas migratorias ha empezado la caza a un patrocinador o un abuelo gallego en España. El pasado 5 de enero, el presidente norteamericano anunció de forma sorpresiva un cambio radical de la política migratoria. Esto con el fin de detener la entrada masiva de emigrantes ilegales por la frontera mexicana.
Por un lado, el Gobierno Biden estableció una oferta de cupos legales de admisión para hasta 30.000 emigrantes mensuales procedentes de Cuba, Venezuela, Nicaragua y Haití. Pero como condición deberán tener un patrocinador en EE. UU. que se haga cargo de su manutención. Por otro, anunció que los que a partir de ese momento trataran de entrar de forma ilegal por la frontera serían deportados de inmediato a México. Esto aclarando que los repatriados no podrán volver a solicitar ingresar legalmente a EE. UU. en un plazo de cinco años.
“Cerrada la vía de cruzar fronteras, ahora solo queda buscarse un padrino en territorio norteamericano que ampare al candidato a emigrante”, explica Lázaro. Este trae la noticia de una página que acaba de abrirse en Facebook (bautizada “Patrocinadores EE. UU.”). En esta pueden leerse mensajes como el siguiente: “Hola, busco un patrocinador para dos adultos, ambos profesionales, y un niño de 5 años. No tengo dinero, pero podría pagar por cuotas mensuales por el tiempo que dure el patrocinio… Somos personas responsables que buscan una ayuda de alguien que nos permita un cambio de vida”, escribe una cubana llamada Marlén Rodríguez. Otra persona ofrece casa y coche en La Habana a cambio de patrocinio. Un tercero está dispuesto a poner 10.000 dólares encima de la mesa al alma caritativa que le respalde en Estados Unidos. “Así están las cosas”, dice Lázaro.
Opina Lázaro que, aunque en principio parezca generoso, el cambio de política norteamericano en realidad cierra las puertas a las crecientes ansias de emigrar.
“Desde que en noviembre de 2021 Nicaragua eliminó el visado para los ciudadanos cubanos, más de 270.000 se marcharon y entraron a EE. UU. por México. Señala que se trata de un éxodo sin precedentes, y observa que esta travesía podía costar entre 8.000 y 10.000 dólares por persona. Era una “vía expedita” para largarse, pues al llegar a EE. UU. en pocos días eran liberados por las autoridades migratorias y comenzaba el proceso regulatorio. “Ahora no, ahora los cubanos tienen que entrar por el aro y buscarse un patrocinador, algo que no es tan sencillo”.
Biden impedirá que migrantes de Cuba, Haití y Nicaragua soliciten asilo
El presidente Biden anunció que Estados Unidos comenzará a impedir que personas migrantes procedentes de Haití, Nicaragua y Cuba soliciten asilo en el país . Esto si son detenidas al cruzar la frontera entre Estados Unidos y México.
Estos solicitantes de asilo serán expulsados a México sin el debido proceso de acuerdo con una ampliación de la controvertida política migratoria. La cual está basada en el Título 42 del Código de Regulaciones Federales que se inició durante la presidencia de Trump. La Corte Suprema de Estados Unidos decidirá en su próxima sesión el destino de dicha política.
Sin embargo, Biden también anunció que un pequeño número de personas haitianas, nicaragüenses y cubanas podrán acogerse en Estados Unidos. Esto se debe a un programa que les concederá permiso temporal para vivir y trabajar en Estados Unidos solicitando el asilo desde sus países de origen. Esto además de tener que contar con patrocinadores financieros en Estados Unidos.
El anuncio se produce antes de la visita que Biden realizó a la ciudad de El Paso, estado de Texas, para reunirse con las autoridades locales. Siendo el primer viaje de Biden a la frontera entre Estados Unidos y México desde que asumió la presidencia. En los comentarios que realizó este jueves, Biden no hizo ninguna mención sobre las duras sanciones de Estados Unidos contra Nicaragua y Cuba. Las cuales han contribuido a agravar la pobreza en esos países. Así como tampoco reconoció las devastadoras consecuencias que las intervenciones estadounidenses han tenido en Haití.
“Si usted está intentando salir de Cuba, Nicaragua o Haití o tiene planeado comenzar un viaje hacia Estados Unidos, no se presente simplemente en la frontera. Quédese donde está y haga la solicitud desde allí de forma legal. A partir de hoy, si no presenta la solicitud a través del proceso legal, no podrá acogerse a este nuevo programa de permisos”.
La Unión Estadounidense para las Libertades Civiles declaró: “Las expulsiones amparadas en el Título 42 ya constituían un uso indebido e injustificable de las leyes sobre salud pública. […] Seamos claros: no se justifica que el Gobierno amplíe [la política basada en] el Título 42 mientras [al mismo tiempo] afirma estar preparándose para su finalización. No hay ninguna razón para que los beneficios del nuevo programa de permisos para cubanos, nicaragüenses y haitianos dependan de la ampliación de estas expulsiones peligrosas”.