La economía de Israel ha experimentado un brusco frenazo en el último trimestre de 2023, registrando una contracción del PIB del 19,4% anualizado entre octubre y diciembre. Este abrupto descenso se debe principalmente al estallido del cruento conflicto con el grupo Hamás en la Franja de Gaza, que paralizó la actividad económica.

Un conflicto que hunde la economía de Israel

El enfrentamiento armado con Hamás en Gaza, iniciado el 7 de octubre, tuvo un efecto devastador sobre el crecimiento económico israelí en el último trimestre del año. De hecho, se trata de la mayor caída trimestral del PIB desde el segundo trimestre de 2020, cuando se desplomó 29% debido a la pandemia.

Entre octubre y diciembre, el gasto en consumo privado se contrajo 26,9% y la inversión un 67,8% interanual, mientras que las exportaciones cayeron 18,3% y las importaciones 42,4%. El sector industrial ha sido uno de los más afectados, con el Índice de Gestores de Compras aún por debajo de los niveles previos a la guerra.

Crecimiento de apenas el 2% en 2023

A pesar del fuerte impacto negativo en el cuarto trimestre, la economía de Israel logró crecer un 2% en promedio durante el conjunto de 2023 gracias a la expansión registrada en los primeros nueve meses del año, antes del estallido bélico.

De cara a 2024, el Banco Central de Israel ya ha rebajado sus previsiones de crecimiento al 2%, mientras que el Ministerio de Finanzas espera solo un incremento del PIB del 1,6%. Ante este panorama, no se descartan nuevos recortes en las tasas de interés por parte del banco central para estimular la maltrecha economía.

Lula compara la guerra con el Holocausto y desata la ira israelí

Las declaraciones del presidente de Brasil, Lula da Silva, acusando a Israel de “genocidio” en Gaza y comparando la situación con el Holocausto nazi durante la Segunda Guerra Mundial, no hicieron sino echar más leña al fuego.

“No es una guerra entre soldados y soldados. Es una guerra entre un Ejército altamente preparado y mujeres y niños…Brasil condena a Hamás, pero no puede dejar de condenar lo que Israel está haciendo en la Franja de Gaza», afirmó el mandatario.

El canciller israelí, enfurecido, declaró a Lula como persona non grata en Israel hasta que se retracte públicamente. El mandatario brasileño también había criticado la suspensión de fondos a la agencia de la ONU que brinda ayuda humanitaria a los palestinos. Más de 30,000 palestinos han muerto en el conflicto.

Consecuencias geopolíticas

Más allá del ámbito puramente económico, el conflicto en Gaza y especialmente las declaraciones de Lula ponen de manifiesto las complejas ramificaciones geopolíticas de la crisis entre israelíes y palestinos.

Por un lado, se han intensificado las tensiones con países latinoamericanos históricamente cercanos a la causa palestina como Brasil. Por otro, la credibilidad de Israel como socio estratégico de Occidente en Oriente Medio se ha visto dañada ante la opinión pública internacional.

La rápida resolución del conflicto y un ejercicio de mayor prudencia diplomática por todas las partes serán fundamentales para encarrilar la recuperación de la economía de Israel en 2024.