El uso del glutatión para blanquear la piel cada vez está más extendido en el todo el mundo. No obstante, científicos y autoridades sanitarias han advertido sobre los peligros de inyectarse esta proteína.
Las inyecciones de glutatión son una de las últimas modas para tener más clara la piel. Un bulbo puede costar hasta 35 dólares; pero los resultados de este dudoso método “blanqueador” no han sido totalmente demostrados por los científicos. Glutatión, para blanquear la piel, descubre el polémico antioxidante
No obstante, su comercialización sigue creciendo, así como la fama de este supuesto “antioxidante maestro”. De acuerdo con la agencia reguladora de Estados Unidos, “muchos productos, comercializados libremente, son potencialmente inseguros e inefectivos y pueden contener ingredientes desconocidos o contaminantes”. Esta entidad no dio su visto bueno a esas inyecciones.
El glutatión es una proteína que el cuerpo humano produce de manera natural. Su principal función es proteger células, tejidos y órganos. Cuando envejecemos, comenzamos a producir menos glutatión. A partir de esto, es normal que las personas busquen consumir productos ricos en glutatión. Esta proteína se utiliza en tratamientos vinculados con distintas enfermedades coronarias, el Parkinson y el Alzhéimer.
Uso impropio de esta proteína
Pero el uso del glutatión cada vez es más diverso. Centros de belleza de todos los continentes venden a sus clientes distintos tratamientos a base de glutatión para “blanquear” la piel. El argumento científico es la capacidad de esta proteína de reducir la producción de melanina, que es el pigmento que establece el color de nuestra piel.
La industria cosmética ha convertido al glutatión en un gran negocio. Se venden aerosoles, pastillas, jabones a base de este antioxidante, con la promesa de aclarar el tono de nuestra piel. La opción supuestamente más efectiva es inyectar directamente el glutatión, una o dos veces a la semana.
El glutatión inyectable es el más buscado, ya que cuando se administra de forma oral sus resultados tardan más en apreciarse. La razón es que los jugos gástricos degradan al glutatión y, por tanto, el cuerpo absorbe poco. Sin embargo, con las inyecciones sí aumenta rápidamente el nivel de glutatión en el sistema circulatorio.
Glutatión, un tratamiento polémico
A día de hoy no existen estudios concluyentes sobre la capacidad real del glutatión de aclarar la piel. Diferentes agencias reguladoras sanitarias han expresado su preocupación por el uso extendido del glutatión, sobre todo en su versión inyectable.
Filipinas es uno de los países del mundo donde más se recurre al glutatión inyectable. Allí las autoridades han advertido que, en dosis muy altas, el glutatión no es seguro y podría provocar graves consecuencias en la salud de las personas.
Entre los posibles daños al cuerpo humano están desequilibrios en la tiroides, así como un fuerte dolor abdominal y un molesto sarpullido. A pesar de las llamadas de alerta, el glutatión se vende, mucho y caro en todo el mundo. Si quieres tener la piel más clara, ¿te inyectarías el glutatión?