La Universidad de Harvard demostró que comer nueces da una mayor esperanza de vida y otros beneficios como menor riesgo de muerte por infarto

Una reciente investigación realizada en Harvard demostró que comer nueces da una mayor esperanza de vida y menor riesgo de muerte por infarto que aquellos que no consumían ese fruto seco.

Este estudio apareció en la prestigiosa revista Nutrients. Los científicos encontraron que las personas que comían una onza de nueces a la semana tenían hasta un 25% de menor riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares que los que no probaban ese fruto. Además, otra conclusión fue que comer esa cantidad del fruto seco aumentaba en 1,3 años la esperanza de vida.

De acuerdo con Yanping Li, uno de los autores del estudio, “incluso unos pocos puñados de nueces por semana pueden ayudar a promover la longevidad, especialmente entre aquellos cuya calidad de dieta no es excelente para empezar». El científico aclaró que este era “un consejo práctico que puede ser factible para aquellas personas que buscan mejorar su salud, lo que puede suponer una prioridad para muchos».

Propiedades de las nueces

Las nueces tienen múltiples propiedades beneficiosas para la salud. Los nutricionistas han aclarado que este es un alimento que aporta mucha fibra y no hace a la persona engordar.

Otra investigación, liderada por expertos del Centro de Salud de la Universidad de Connecticut y la Universidad de Texas A&M, aseguró que las nueces «contienen una compleja variedad de compuestos naturales y fitoquímicos que exhiben una amplia gama de beneficios para la salud, incluida la protección contra la inflamación y el cáncer de colon».

Además, los expertos aclararon que la gran cantidad de calcio de las nueces era muy favorable para el sistema óseo. A todo esto, se añade que las nueces tienen un alto contenido de triptófano. Este contribuye a que generemos más serotonina y así levantamos el ánimo.

Cómo comer nueces

Las nueces tienen muchos ácidos grados Omega. Por tanto, el hecho de comerlas nos ayuda a reducir el colesterol. También nos permite conciliar mejor el sueño y evitar el insomnio. Los expertos han encontrado que el ácido linoleico, muy presente en las nueces, retarda las alteraciones en el sueño.

En tiempos de coronavirus es muy útil saber que las nueces tienen mucho zinc. Este nos ayuda a mitigar síntomas muy comunes en las gripes, como los estornudos, dolores de garganta y la mucosidad.

Las nueces tienen un sabor delicioso. Podemos comerlas crudas o combinadas como parte de postres, sopas, salsas y ensaladas.

En la repostería las nueces son habituales, especialmente la nuez molida, en pasteles, tartas, panqués y helados. Esta nuez, por lo general, se emplea como reemplazo de la harina de trigo, porque acentúa el sabor de los productos horneados.