Los escándalos en que han sido involucrados McDonald´s y, ahora, Subway nos hacen preguntar ¿sabemos que lo que comemos es comida chatarra?

Otro escándalo sobre la comida chatarra es viral y la gente se pregunta: ¿sabemos lo que comemos en los restaurantes de comida rápida? Los escándalos en los que se ha visto involucrada McDonald´s y, ahora, Subway muestran que las personas cada vez dudan más sobre la calidad de lo que venden estas cadenas.

Dos ciudadanos estadounidenses demandaron a Subway porque encontraron que, en los famosos sándwiches de atún de esta empresa, en realidad no había atún. Ellos realizaron pruebas de laboratorio y los resultados fueron preocupantes. En lugar del pescado, la empresa había utilizado una sustancia desconocida que simulaba el sabor y la tonalidad; pero que, definitivamente, no era atún. Subway negó cualquier falsificación de sus ingredientes; pero el caso irá a juicio.

Dos ciudadanos estadounidenses demandaron a Subway

Dos ciudadanos estadounidenses demandaron a Subway

¿Qué es la comida chatarra?

Por comida chatarra entenderemos todos aquellos alimentos cocinados o precocinados que contienen muchas grasas saturadas, azúcar, harinas o féculas, sal, grasa hidrogenada. Por tanto, son alimentos que tienen muchas calorías en poca cantidad de producto; sin embargo, no cuentan con otros nutrientes esenciales para el organismo como vitaminas, antioxidantes y minerales.

La cantidad de productos considerados “comida chatarra” es enorme. Salchichas, pizzas, hamburguesas, alitas de pollo empanizadas, chocolates, golosinas, refrescos gaseados forman parte del menú de McDonald´s, Subway, Wendy´s, KYC y decenas de cadenas de comida rápida.

¿Por qué nos atrae tanto la comida chatarra?

En realidad, no hay ningún problema con ingerir comida chatarra. El tema comienza a complejizarse cuando esa ingestión se convierte en un hábito.

A día de hoy la “comida chatarra” o “fast food” es cada vez más habitual en las sociedades contemporáneas. En primer lugar, porque como indica su nombre es una forma rápida, sencilla y económica de comer. En lugar de invertir nuestro tiempo, cada vez más escaso, en preparar menús diversos, pero en ocasiones complicados de realizar, preferimos irnos por la opción más simple. Ahorramos horas, pero terminamos perdiendo años de nuestra vida.

Además, no nos engañemos, la comida chatarra nos entra por los ojos y la nariz. Nos parece apetitosa, sabrosa.

¿Qué perjuicios provoca en nuestra salud el hecho de alimentarnos así?

¿Qué sucede cuando la comida chatarra se convierte en nuestro menú habitual? La lista de potenciales daños a nuestra salud es extensa.

En primer lugar está la obesidad. Hoy existen muchas campañas que impulsan a que cada vez se consuma menos comida chatarra, especialmente refrescos gaseados. Los científicos han encontrado en estos refrescos una de las principales causas del aumento de la obesidad en no pocos países. Los elevados índices de azúcares, de grasas saturadas y harinas descontrolan nuestro peso.

Otro serio problema es que crece el riesgo de padecer diabetes. estos alimentos tienen sustancias que transforman la flora intestinal. Con esto se facilita el desarrollo de la resistencia insulínica, que es el antecedente de la diabetes tipo 2.

Estudios confirman que el alto consumo de comida chatarra provoca enfermedades

Diversos estudios han confirmado que el alto consumo de alimentos de este tipo provoca enfermedades cardiovasculares. La explicación de esto radica en los niveles de colesterol malo en sangre que provocan la gran cantidad de grasas saturadas y trans presentes en estos alimentos.

Además, los problemas no están solo en la parte física, sino también mental. Varias investigaciones documentaron que las personas que consumen mucha comida basura son más propensas a desarrollar depresión.

Los doctores no recomiendan que se elimine por completo la comida chatarra, sino que se reduzca su consumo.

El escándalo de Subway añade otra variable a una ecuación de por sí ya complicada. Si además de vendernos alimentos que poco aportan a nuestra salud, las cadenas de restaurantes de comida rápida falsifican los ingredientes, entonces e