Binance es el mayor Exchange del mundo. La empresa, propiedad del magnate Changpeng Zhao, no aparece registrada en un paradero conocido. Tampoco cotiza en bolsa. Además, en meses recientes ha movido grandes sumas de dinero a países como Lituania, Kazajistán o Seychelles. Dichos movimientos se realizaron a través de dos criptobancos que luego quebraron, Signature Bank y Silvergate Bank.  Estas son claras señales que apuntan a un posible fraude que podría provocar una abrupta caída del valor de las criptomonedas.

La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) demandó tanto a Binance como a Coinbase por actuar de forma ilegal en el mercado de valores. La resolución de la SEC identificó a 12 criptomonedas que estaban operando sin licencia oficial en Estados Unidos. Estas criptodivisas son las principales que manejan ambos Exchanges. A esto se añade que Binance y Coinbase tienen sus propias criptomonedas, también ilegales según la SEC.

La demanda de la SEC contra Binance señala que Zhao ha sacado miles de millones de dólares de sus clientes y los ha colocado en dos empresas suyas. Una de ellas es Merit Peak, incorporada en Islas Vírgenes. La otra es el market maker Sigma Chain, registrado en Suiza. Con estas acciones ha logrado blanquear dinero y, de paso, comprarse un lujoso yate valorado en 11 millones de dólares.

Los expertos consideran que si la SEC logra demostrar que Binance ha robado fondos de sus clientes estadounidenses esto sería suficiente para declarar al Exchange como un megafraude. El resto de los clientes globales de Binance tendrían razones más que suficientes para considerar que también han sido estafados por ese Exchange.

A partir de las demandas, aumento el miedo extremo. Los clientes decidieron retirar miles de millones de dólares de Binance. Al mismo tiempo, los bancos de Estados Unidos optaron por limitar sus intercambios con Binance. Esto hizo que el Exchange dejara de aceptar dólares estadounidenses.

Ante acusaciones tan fuertes, las personas trazan paralelos con un escándalo reciente que removió al mundo de las criptomonedas: el robo de FTX. El CEO de esta empresa, Sam Bankman-Fried, sacaba dinero de sus clientes de FTX y lo colocaba en Alameda Research, para efectuar operaciones financieras con ese dinero. Zhao podría estar haciendo lo mismo. ¿También terminará en la cárcel o se trata de una estrategia política de la SEC, que ve a las criptomonedas como enemigas del orden financiero actual?