El panorama político tras las elecciones en Colombia del pasado domingo muestra un país incomparable al del pasado
Las elecciones en Colombia han llamado a las urnas para escoger los candidatos de cada coalición y la conformación del Senado y la Cámara.
Pero, precisamente por la novedad de las consultas interpartidistas, una jornada en teoría prelectoral se convirtió una suerte de primera vuelta. Esto en una elección de tres rondas que definirá el poder en el país entre 2022 y 2026.
El 29 de mayo los colombianos votarán por presidente en primera vuelta y es probable que sea necesaria una segunda ronda el 19 de junio.
Según los resultados del domingo, la campaña presidencial parece polarizada entre la izquierda y derecha. Esto a pesar de que las legislativas mostraron un país fragmentado, diverso y difícil de encajar en un solo —o dos, o tres— espectro ideológico.
La fuerza arrolladora de Petro
El senador y exalcalde de Bogotá perdió la segunda vuelta hace 4 años contra Iván Duque. Desde entonces se ha dedicado a hacer campaña y aceitar su candidatura.
Se esperaba, entonces, que le fuera bien. Pero que un exguerrillero crítico del status quo sea por tanto el favorito de una elección es un desarrollo insólito para un país. Esto porque casi siempre gobernó la derecha.
El fenómeno Francia Márquez
En la consulta del Pacto Histórico, Petro le ganó por 65 puntos porcentuales a Francia Márquez. Una líder social que, sin embargo, se convirtió en el fenómeno más novedoso de la jornada.
Márquez entró a la política y ganó varios premios internacionales por su lucha contra grandes empresas de explotación minera.
Ahora Márquez se proyecta no solo como la vicepresidenta o una de las ministras estrella del potencial gabinete de Petro. Sino también como una de las políticas más influyentes de las próximas décadas en Colombia.
El éxito de las maquinarias que se daban por muertas y el fracaso de las que se creían fuertes
Mucho se habló en los últimos meses de las llamadas maquinarias. Esquemas de clientelismo a través de los cuales candidatos suman apoyo con los avales de poderes locales enquistados allí durante décadas.
El domingo, las maquinarias que se daban por vestigios de un pasado que nadie quiere repetir mostraron su poderío. Sobre todo, las dos fuerzas que tradicionalmente dominaron la política en el siglo XX: el Partido Liberal (15 senadores) y el Partido Conservador (16 senadores).