El gobierno de Venezuela ofreció “salvar al mundo” y el envío de petróleo a Cuba es fundamental para la isla
Abasteciéndolo con el petróleo y el gas que hoy falta, producto de la crisis por la invasión rusa a Ucrania, el envío de petróleo a Cuba y otros países es de suma importancia para la economía de América Latina. Un petróleo cuya producción, desde el 2014, no ha permitido abastecer el consumo interno de gasolina, gasoil y gas. Así creando el racionamiento de combustible y la crisis doméstica, de transporte y de la industria más grande de su historia.
Pese a que en el último cuatrimestre de 2021 se obtenían unos 85.000 barriles, siguen restando al consumo interno y el racionamiento continúa o ha empeorado.
Para paliar la crisis, desde hace varios años Pdvsa ha aceptado combustible importado como pago por sus exportaciones de crudo. Pero estos intercambios con su socio principal, su filial de refinación estadounidense Citgo, se interrumpieron cuando Venezuela bajó su producción en el 2017. Citgo tuvo, entonces, que proveerse de petróleo canadiense.
Por su parte, Estados Unidos sancionó a Pdvsa en 2019. Desde entonces, Estados Unidos también ha presionado a otros socios comerciales de Pdvsa, como la española Repsol, la italiana Eni y la india Reliance. Esto para que no suministren gasolina, aunque se les había dado permiso para enviar diésel.
La escasez se agravó cuando la petrolera rusa Rosneft detuvo sus operaciones en el país en marzo de ese año.
No obstante, Venezuela continuó con el envío a Cuba de unos 90.000 barriles diarios de crudo, parte del cual Cuba vende. El resto lo usa para producir energía, y que luego descuenta como contraprestación por los servicios de asesoría política, inteligencia y apoyo médico que nos presta.
Aunque Venezuela logró duplicar sus exportaciones de petróleo en junio de 2022, a 487.000 barriles por día (bpd), redujo sus entregas a Cuba a 9.740 bpd. Muy por debajo del promedio de los últimos meses.
De acuerdo con los datos disponibles, Cuba es el cuarto destino del petróleo venezolano, pero muy alejado de China, que absorbe 80% del crudo. Los siguientes receptores fueron dos recién llegados al mercado de Caracas, España (13%) e Italia (5%).
No obstante, las cifras de exportaciones están aún muy lejos de la meta fijada por el gobierno venezolano. Aspiraban vender unos 830.000 bpd en el mercado internacional y producir al menos dos millones de bpd.