Las cifras recientes muestran un aumento significativo en el uso del yuan chino en el comercio internacional. El yuan ahora representa el 4.5% de las transacciones comerciales globales, frente a menos del 2% hace un año, según datos de Swift. Esto contrasta con la persistencia del dólar estadounidense, que sigue dominando el mercado ampliamente, con un 84.3%.

Analistas atribuyen este auge del yuan en parte a la guerra de Rusia en Ucrania y las sanciones occidentales subsequentes contra Moscú. Tras imponer un bloqueo a Rusia para impedirle el acceso al sistema Swift,  gran parte del comercio ruso-chino ahora se realiza en yuanes a través de intermediarios.

La exclusión de Rusia del sistema financiero occidental ha acentuado la necesidad percibida por otros países de utilizar monedas alternativas para el comercio bilateral. China ofrece su sistema CIPS como una opción al Swift, lo cual ha experimentado un crecimiento del 21% en transacciones el año pasado. Países como Arabia Saudita y Brasil buscan acuerdos comerciales en yuanes con China; mientras en Bolivia el yuan también gana terreno.

Políticas monetarias divergentes, otra explicación del auge del yuan chino

Otro factor es la divergencia en las políticas monetarias entre Estados Unidos y China. La Reserva Federal (FED) ha continuado subiendo fuertemente las tasas de interés, por lo que el financiamiento en dólares se ha vuelto más costoso comparado con el yuan, cuyas tasas han bajado. Esto hace al yuan chino más atractivo para obtener crédito comercial.

Si bien nada de esto significa el fin del dominio del dólar, este panorama apunta a una mayor fragmentación del sistema financiero global anteriormente centrado en el dólar estadounidense. La posibilidad de sanciones unilaterales por parte de Estados Unidos siembra dudas entre países emergentes sobre la confiabilidad de mantener reservas en dólares. No obstante, datos recientes muestran que el 59% de todas las reservas mundiales se mantienen en dólares. Mientras, las reservas en euros suponen el 21%. Las reservas en yuanes representan actualmente el 2.7%.

En lugar de un reemplazo total del dólar estadounidense, los analistas coinciden en señalar que se vislumbra una proliferación de redes de compensación bilateral entre monedas nacionales para el comercio, como lo fue el sistema europeo de pagos creado en los años 50. Esto presenta desafíos, dado que el yuan chino no tiene aún la aceptación mundial del dólar. Pero la tendencia hacia la internacionalización del yuan parece ya estar en marcha.