Mattel honrará a la “Reina de la Salsa”, la cubana Celia Cruz, con la edición especial de una muñeca Barbie creada a su imagen y semejanza

En el mes de la herencia hispana en Estados Unidos, la compañía de juguetes lanzará la muñeca que muestra muchos de los accesorios que siempre llevó Celia Cruz. Por ejemplo, tiene pulseras plateadas, aretes largos, un collar y aparece con el peinado recogido, característica esencial de la gran cantante.

Esta edición especial de Barbie tiene un vestido rojo, de corte sirena y lleva un micrófono. «A través de sus carreras legendarias y su valentía en la autoexpresión, estas mujeres continúan inspirando a generaciones de jóvenes latinos a contar sus historias con orgullo», señaló la empresa productora de las Barbie en sus redes sociales.

En Instagram, Mattel publicó: “No hay nada más poderoso que usar nuestra voz. En el mes de la Herencia Hispana, Barbie se complace en honrar la memoria de la inimitable Reina de la Salsa, Celia Cruz, con una muñeca única en su tipo. Como artista teatral, actriz y artista de grabación que tuvo éxito en una escena musical dominada por hombres, Celia Cruz también es conocida como la Triple Amenaza Latina”.

El legado de la Reina de la Salsa

El legado de la Reina de la Salsa

Celia Cruz es una de las artistas cubanas más conocidas en el mundo. Comenzó su carrera en La Habana, donde alcanzó gran fama. En 1960 salió de Cuba y solo regresó una vez más, en una visita privada. El resto de su exitosa carrera lo hizo entre México y Estados Unidos.

“La Reina de la Salsa” grabó 37 discos. Ganó 2 Grammys y 2 Grammys Latinos. También tuvo algunas incursiones en el cine y la televisión. Su canción “La vida es un carnaval” fue considerada por la revista Rolling Stones, como una de las 500 mejores de todos los tiempos.

Entre sus temas icónicos, además de “Carnaval”, encontramos a Quimbara, Burundanga y La negra tiene tumbao. Una de sus expresiones más conocidas, “azúcar”, ha quedado como símbolo de la música latina.

Además de su excelente voz, Celia Cruz sobresalió por sus vestidos extravagantes y la utilización de pelucas de diferentes colores. Solía llevar vestidos muy ajustados, donde abundaban las lentejuelas y llevaba, por lo general, tacones altos.

Su impacto en la comunidad latina en Estados Unidos fue tan grande que la cubana recibió tres doctorados Honoris Causa, de Miami University, Florida International University y Yale.

Cruz murió en 2003, en Nueva Jersey, a los 77 años. En el último lustro ha recibido numerosos reconocimientos. En abril de este año se desveló un mural que la honra, en la populosa Calle Ocho de Miami. Mientras, también este año, en el Bronx neoyorquino rebautizaron una calle con su nombre.