Las redes sociales, como Facebook e Instagram, cada vez son más utilizadas, también para el control mental. ¿Cómo nos vigilan? Te contamos

Meta es el gran holding que controla a tres de las redes sociales digitales más poderosas del mundo y su meta podría ser el control mental de la población. Facebook, Instagram y WhatsApp pertenecen a un mismo hombre: Mark Zuckerberg. Cada día, 2.500 millones de personas utilizan al menos una vez estas redes. Más allá de los millones de dólares que ingresa en su ya amplia fortuna, la gran Meta de este polémico hombre parece ser el control mental sobre la ciudadanía.

Durante mucho tiempo, las organizaciones de seguridad han tratado de obtener el control mental sobre las personas. En las décadas de los cincuenta y sesenta del siglo pasado, la CIA experimentó con LSD, torturas, hiponosis para lograr el control sobre una persona. Ahora, con Meta, el proceso es mucho más simple y rápido.

Los escándalos de Facebook

El historial de experimentos de Facebook con los datos de las personas es extenso y documentado. En 2014, condujeron experimentos psicológicos con 70.000 personas, sin que ellas lo supieran. El objetivo era determinar cómo reaccionaban a las transformaciones en los flujos de noticias que les mostraban en su muro. Además Faceebook es una de las redes que más censura el contenido que no le gusta.

En 2016, Facebook fue la principal plataforma para la difusión de noticias falsas que favorecieron la elección de Donald Trump. Dos años más tarde se supo que la empresa Cambridge Analytica accedió a las cuentas de 50 millones de estadounidenses, en las fechas previas a las elecciones. Luego, con esos datos, la empresa pudo enviar mensajes personalizados a cada una de esas cuentas. El contenido de esos mensajes buscaba favorecer a Trump y perjudicar a Hillary Clinton.

En el propio 2018 explotó otro escándalo. Facebook compartió datos de sus usuarios, sin su consentimiento, con Amazon, Samsung y Apple. Más tarde se supo que utilizó los números de teléfonos empleados para la autenticación en esa red para mostrar anuncios publicitarios todavía más personalizados.

Los expedientes contra Facebook siguieron aumentando. Este año, las acusaciones de Frances Haugen, una extrabajadora de Facebook, condujeron a otro escándalo. En los llamados “Facebook Files” quedó demostrado que Zuckerberg sabía el resultado de una investigación interna sobre Instagram. De acuerdo con ese estudio, Instagram podía ser perjudicial para los menores de edad. Zuckerberg no hizo nada para tratar de resolver el problema.

Facebook, el Gran Hermano que nos vigila

En su profética novela “1984”, George Orwell advirtió sobre el peligro del Gran Hermano. Una entidad que sabía todo sobre las personas. Que podía anticipar movimientos. Que vigilaba cada paso. En otras palabras: el Facebook de 2021. Aunque el problema no está solo en Facebook. También en Google, Amazon y en todas las compañías que, al parecer, nos ofrecen servicios gratuitos. En realidad, nada es gratuito. Pagamos un altísimo precio, porque pagamos con nuestros datos.

El Gran Hermano Facebook conoce nuestras películas favoritas. Sabe los sitios que hemos visitado. Nuestro estado sentimental. Quién es nuestra familia. Cuáles son nuestros amigos. Qué contenidos nos atraen más. Lo sabe todo, porque todo se lo hemos dicho. No culpemos solo a Zuckerberg. Él vio una oportunidad y, como todo buen empresario, la aprovechó.

Lush asegura estar «feliz de perder 13 millones de dólares» por abandonar las redes sociales

El director general de la marca de cosméticos Lush dijo estar «feliz de perder 13 millones de dólares» tras haber eliminado sus cuentas de redes sociales. Esto en respuesta a los daños que éstas causan en las adolescentes, tal y como quedó reflejado en una investigación interna de Facebook filtrada recientemente.

La empresa de cosméticos cerró este viernes sus cuentas de Facebook, Instagram, TikTok y Snapchat a nivel mundial.

A comienzos de esta semana la marca británica anunció su salida de las redes. Esto en vísperas de uno de los mayores días de compras de todo el año, el llamado ‘black friday’.

«Estoy feliz de perder 10 millones de libras esterlinas (13,3 millones de dólares). Esto por abandonar Facebook», dijo Mark Constantine, director general de la empresa a The Guardian, adelantando las consecuencias financieras que conllevará la decisión.

Molesto por la falta de reacción de Meta ante las informaciones filtradas que sugiere que su aplicación Instagram empeora los problemas de imagen corporal de adolescentes. El directivo asegura que no le quedaba «otra opción».

«Simplemente pensé: ‘esa es su propia investigación y la están ignorando y nosotros estamos atrayendo a la gente a su plataforma'». Así expresó el empresario de 69 años.

Saliendo al paso de las suposiciones que aseguran que, en realidad, el paso dado es una jugada de marketing para atraer a más clientes. Constantine aseguró que se trata de una decisión tomada por «razones genuinas». «No lo hemos hecho como un truco de relaciones públicas», dijo, agregando que si la marca diera marcha atrás ahora «sería un hazmerreír».